El cambio obligado a gas o gasóleo en los buques, amenaza para los precios .
Elcomerciodigital.com
20.10.12 - N. PRIETO | GIJÓN.
Los navieros piden «compromiso» a la carretera para dar viabilidad a nuevos proyectos intermodales
Si un día antes una perspectiva ecologista llevó al congreso de los ingenieros navales y oceánicos la defensa de que los barcos utilicen combustibles más 'limpios', ayer dicho cambio fue presentado, en el mismo foro, como una amenaza para el desarrollo de la intermodalidad.
A principios de 2015, los barcos que operen en la Unión Europea deberán reducir significativamente las emisiones de azufre a la atmósfera, lo que implicará abandonar el fuelóleo para quemar gasóleo o gas natural.
La segunda opción sólo valdría para nuevas construcciones, explicó el director de Anave, porque los tanques ocupan casi el doble y es impensable adaptar barcos ya operativos. El gasóleo es la opción casi obligada, pero, según indicó el mismo Manuel Carlier, supondrá un incremento de los precios del combustible entre un 50 y un 70%. El actual fuelóleo cuesta ahora 662 dólares la tonelada, mientras que el gasóleo sale por 992 dólares, manifestó Carlier.
En esas condiciones, todo apunta a que se producirá un encarecimiento de los servicios por un cambio que Juan Riva asumió, aunque pidió flexibilidad en los plazos para adaptar las cosas.
El «impresionante desarrollo» que, en palabras del representante de la naviera Grimaldi, Mario Massadotti, experimentó el cabotaje europeo en la última década, podría verse frustrado por el encarecimiento de los precios.
Los navieros quieren seguir ofreciendo un buen servicio, pero aseguran que los costes fijos de un barco dificultan poner en marcha nuevas conexiones sin amplias garantías de que las pérdidas previsibles durante los meses o años de rodaje van a ser compensadas con una rentabilidad futura y, además, el riesgo se repite si la posibilidad de aumentar la frecuencia obliga a poner en servicio un barco más (caso de la autopista del mar de Gijón).
Por eso, la petición de calidad en la oferta que realizó Marcos Montero como representante del transporte por carretera fue contestada con la propuesta de que los camioneros firmen contratos de utilización de las líneas marítimas que garanticen, al menos, unos ingresos fijos.
La idea no es nueva (se planteó con vistas a poner en marcha la autopista del mar de Vigo), pero no parece fácil alcanzar tan amplio compromiso.